El Coordinador del GLPRI, Heriberto Treviño, anunció que se presentará una reforma a la Ley General de Educación para combatir prejuicios y tabúes.
Para que las niñas y adolescentes tengan garantizado de forma gratuita el acceso a productos de higiene menstrual y así como la información al respecto, desde una perspectiva de género, objetiva, laica, científica y digna, el Coordinador del Grupo Legislativo del PRI, Heriberto Treviño Cantú, anunció que, junto con las Diputadas priístas, presentará una iniciativa de reforma a la Ley General de Educación.
En cumplimiento a la Agenda Temática planteada para este periodo de sesiones, el líder de la bancada del PRI en el Congreso local hizo hincapié en que la menstruación sigue siendo un tema tabú en varios sectores de sociedad, por lo es primordial hacerlo visible para atenderlo de manera integral y adecuada, con una visión de género en apoyo de todas las mujeres, desde la pre adolescencia hasta la edad adulta.
“Es un tema muy sensible que amerita un cambio de enfoque en la sociedad, para que veamos a los productos de higiene menstrual como artículos de consumo básico, y así poder generar un verdadero cambio cultural y comercial, con el objetivo de combatir la desigualdad que genera este proceso biológico en las mujeres”, aseveró Treviño Cantú.
Refirió que las Diputadas priístas, Ivonne Álvarez, Elsa Escobedo, Lorena de la Garza, Anita González, Gabriela Govea, Alhinna Vargas y Perla Villarreal son sensibles al tema.
“En la bancada del PRI, particularmente nuestras Diputadas, vemos la necesidad de garantizar de forma gradual y progresiva el acceso gratuito a los productos de gestión menstrual para las mujeres, sobre todo en los planteles educativos de acuerdo con la suficiencia presupuestal de las autoridades”, expuso.
El Coordinador del GLPRI adelantó que la iniciativa de reforma a la Ley General de Educación contempla modificar los artículos 9, 16 y 30, al considerar que es urgente terminar con la “pobreza menstrual”, al lamentar que, en pleno siglo XXI, haya mujeres sin acceso a productos de higiene menstrual, educación responsable, baños e instalaciones dignas, ni gestión adecuada de los desechos, además que las toallas femeninas están gravadas con impuestos.
La propuesta también alienta el cambio de contenidos en los planes de estudio, para que se incluya la educación menstrual dentro de la educación sexual integral y reproductiva, a fin de eliminar prejuicios y acabar con los tabúes que persisten en la sociedad.
“Los principales problemas que tiene que enfrentar una persona menstruante al no tener al alcance productos de higiene menstrual y una educación responsable, son el silencio, ausentismo escolar o laboral, así como infecciones o enfermedades que pueden prevenirse con un ‘cambio de chip’ sobre este tema”, afirmó Treviño Cantú.