Los integrantes de la Comisión de Justicia y Seguridad Pública aprobaron por unanimidad incrementar de dos a siete años de cárcel a quien cometa el delito de robo de autopartes.
Los integrantes de la Asociación Metropolitana de Alcaldes de Nuevo León (AMA) y los integrantes del Grupo Legislativo de Diputados Independientes de la LXXIV Legislatura presentaron la propuesta de modificar el artículo 411 del Código Penal para el Estado de Nuevo León.
“Se impondrá de dos a siete años de prisión, y de cincuenta a trescientas cuotas de multa, a quien después de la ejecución de un delito y sin haber participado en él: Adquiera, posea, desmantele, venda, enajene, comercialice, trafique, pignore, reciba, traslade, use u oculte el o los instrumentos, objetos o productos del delito, con conocimiento de esta circunstancia”.
“Adquiera o realice la venta, intercambio, deposito o cualquier otra forma de transferencia a un tercero, de partes de vehículos de motor sustraídas sin el consentimiento del dueño o legitimo poseedor con el propósito de obtener una ganancia, o Adquiera o realice la compraventa, permuta, deposito, recogido, almacenaje, transporte, proceso o distribución de objetos o materiales producto de un delito, con conocimiento de esta circunstancia. La sanción anterior será aplicable cuando el valor de los objetos, productos, materiales o partes del delito no excede de quinientas cuotas”.
Los promoventes señalan que uno de los delitos patrimoniales de mayor incidencia en los últimos meses en las principales ciudades de nuestro país es el robo de acumuladores para vehículos, mejor conocidos como baterías.
Exponen que desafortunadamente este delito ha ido en aumento y se ha convertido en un jugoso negocio para quienes los cometen y para quienes indirectamente obtienen los beneficios derivados de este.