Como presidenta del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Mariana Echandi, habló el 7 de octubre de los retos que enfrentan los millones de refugiados en diversas regiones del mundo, ante estudiantes de la Facultad de Economía. Al inicio de la conferencia algunos videos dejaron ver la idea de qué es un refugiado, en palabras de Angelina Jolie, Embajadora de la Buena Voluntad de ACNUR, “son las personas más vulnerables del planeta”. En la conferencia titulada “Migración internacional sobre los desafíos de la protección de los refugiados dentro de los movimientos migratorios”, Echandi dijo que esta organización se creó desde 1950 con el fin de ayudar a la población refugiada después de la Segunda Guerra Mundial. “Actualmente ACNUR ayuda a 34.4 millones de personas que han solicitado asilo en un país de donde no son originarios. En caso de persecución, toda persona tiene derecho a buscar asilo y a disfrutar de éste en cualquier país, dice el artículo 14 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos”, argumenta la presidenta de ACNUR. Se considera como refugiado a una persona que está fuera de su país de origen fundado por temores de ser perseguido por motivos de raza, religión, nacionalidad, opinión pública o pertenencia a un grupo social y que no se puede acoger a la protección de su país por temor a tal persecución. “Un refugiado es una persona que ha huido de su país por violencia generalizada, agresión extranjera, conflictos interno o por violaciones a los derechos humanos”, explicó Echandi. También mencionó que quienes están como refugiados en algún país pueden sufrir de muchos abusos, algunos por ejemplo el tráfico y la trata de personas; corren el riesgo de ser amenazados y discriminados por quienes habitan al país en donde solicitan el asilo. Además, la preocupación de los estados por este tipo de migración hacia su territorio ha llevado a gobernantes a buscar una mayor seguridad y prevención de estos delitos y también de evitar que se infiltren éstos refugiados de no ser aceptada su solicitud. “Por supuesto que el dar asilo a cierta cantidad de personas en un país genera mucho gasto, por ejemplo en cuestiones de seguridad y de capacidad nacional de ese país, aunque también se da el caso de que quienes llegan pueden sufrir de hostilidad local y abusar del sistema al que están llegando. “Como respuesta a esto, el control de vigilancia de las fronteras se ha incrementado, además de la intercepción y el rechazo en la frontera, se ha llegado a utilizar la detención y la acusación formal, deportación y retorno de quienes llegan ilegalmente”, mencionó la presidenta de este organismo. El enfoque del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, es el de salvaguardar el bienestar de los no refugiados y brindar protección a quienes lo necesitan, sensibilizar a las autoridades migratorias en el trato a quienes buscan asilo; además de fortalecer las capacidades de los gobiernos manteniendo la integridad de sus sistemas de asilos. Por otra parte, en el patio central de la FAECO está la exposición “Las Naciones Unidas en México: diversidad y equidad”, que se exhibirá hasta el 16 de octubre, en la que se pueden apreciar algunas fotografías de la labor altruista de algunas personas y de este organismo internacional en algunos países.