Para igualar las condiciones de trabajo en Nuevo León, diputados locales aprobaron ampliar la gama de derechos laborales que tiene un trabajador, exigiendo respeto para las libertades y dignidad de quien lo presta y debe de efectuarse en condiciones que aseguren la vida, salud y nivel económico decoroso para el trabajador y su familia.
La reforma a la fracción XLIII del artículo 63 de la Constitución Política de Nuevo León, pretende igualar las condiciones de trabajo y establecer que la jornada diaria máxima de trabajo diurna, mixta y nocturna, será de ocho, siete y media y siete horas, respectivamente.
Desde el pasado mes de noviembre los diputados aprobaron poner bajo estudio este planteamiento, que fue visto ayer durante una mesa de trabajo de la Comisión de Legislación.
Respecto al salario deberá ser igual sin tener en cuenta raza, género, edad, discapacidad, condición social, condiciones de salud, religión, opiniones, preferencias sexuales, estado civil, o cualquier otra que atente contra la dignidad humana y tenga por objeto anular o menoscabar sus derechos o libertades.
“con esta segunda vuelta en donde se amplía la gama de derechos que tienen los trabajadores, uno de los derechos es la no discriminación, la discapacidad, las condiciones de salud, se deja muy claro que no haya discriminación en ningún sentido para los trabajadores”, explicó Héctor García, quien preside la comisión.