La delegación de la Procuraduría Federal del Consumidor en Nuevo León(Profeco) arrancó un operativo para retirar del mercado las lámparas incandecentes y focos de más de 100 watts.
Lo anterior haciendo cumplimiento con la norma oficial mexicana que busca preservar el medio ambiente, la preservación de los recursos naturales y la salvaguarda de la seguridad del consumidor.
De acuerdo con Pedro Salgado Almaguer, delegado de la Profeco en la entidad, y quien encabezó dicho operativo, este tipo de focos y lámparas también dañan la salud del consumidor por lo que exhortó a la ciudadanía en general a no comprarlos y a retirarlos de sus hogares en caso de tenerlos.
“Bueno de entrada son focos que con la exposición al estar prendidos se calientan sobre manera al tocarlos alguien pues pueden sufrir alguna quemadura, son fáciles de quebrar, por lo tanto estos focos, ya por norma, ya por Ley ya no los podemos utilizar, ni mucho menos comercializar que es lo que nosotros nos vamos a asegurar que este tipo de focos que no ayudan al medio ambiente y que ponen en riesgo la salud de nuestros consumidores no estén a la mano de ellos mismos”, expresó en entrevista Zalgado Almaguer.
El funcionario federal destacó que este operativo será permanente en los establecimientos que comercializan este tipo de productos que se ubican en toda el área metropolitana.
Cabe destacar además que durante el primer día de este operativo se retiraron 268 focos de 100 watts y 21 más de 200 watts.
Las acciones de la Profeco obedecen al cumplimiento de la Norma NOM-028-2010.